¿Puedo pedirte un favor?
Aparece, mañana,
entre el tumulto de gente que busca sin saber el qué.
Sonríeme desde lejos y no me sueltes la mirada ni un segundo.
Cuéntame tu día, hazme reír.
Aunque sólo pueda ser en sueños,
que parezca como si pudieses estar oliendo mi pelo.